La primera vez que escuché hablar de Jorge Ibargüengoitia fue en una vieja enciclopedia de autores latinoamericanos. El apellido me llamó la atención desde el primer momento. Sonaba a ingeniero de puentes vasco y un poco a trabalenguas. Descubrí que fue uno de los autores más reputados del llamado boom y sin duda el más mexicano. Intenté buscar alguno de sus libros pero me quedé con las ganas; llevaba años descatalogado. Hace unos meses, por fortuna, RBA ha comenzado a reeditar su obra. Primero fue "Las muertas" y, ahora, muy recientemente "Dos crímenes", obra que me ha fascinado por su mezcla de géneros y su modernidad, casi un guión cinematográfico de John Huston. Su protagonista, perseguido absurdamente por la policía política de México DF, regresa –para esconderse– al pequeño pueblo de su infancia, a la casa de su tío millonario, donde toda una serie de parientes indeseables pelean por llevarse su herencia. Hay mucho de novela negra, algo de western, triángulos amorosos con madres e hijas y ese humor mexicano irónico y mordaz tan presente en autores como Pitol o Bolaño. Una novela que se lee de un tirón, magnífica. Ya estoy esperando que RBA rescate otro título de Ibargüengoitia (por Daniel Entrialgo).
No hay comentarios:
Publicar un comentario